Te contamos sobre los orígenes del arte abstracto

¿Sabes qué es el arte abstracto? Por definición de la Real Academia de la Lengua Española (RAE), el arte abstracto es el tipo o denominación del arte que prescinde de la imitación del natural y de las referencias figurativas. Pero entonces, ¿cómo es posible que, a través del tiempo, el hombre pueda identificarse con el arte de manera subjetiva?

Abstraccionismo, arte no objetivo o arte abstracto, es así como percibimos al tipo de arte que utiliza todo tipo de figuras, colores y formas para dar un tema y concepto a la pieza en la que se plasma(Faxedas, M.L., Del simbolismo a la abstracción: la unidad de las artes en los orígenes del arte moderno, 2018). Los esfuerzos de los artistas por presentar ideas y sentimientos desde un punto de vista no-objetivo, permiten al espectador interpretar desde su propia percepción y dar un significado personal a la obra en cuestión.

Durante el inicio de este tipo de arte, se definía como un tipo de arte puro. Esto fue cerca del comienzo del pasado siglo 20, y su objetivo inicial (el cual perdura en la actualidad), era presentar una obra que ilustrara tan solo lo que había dentro de la imaginación del artista. 

Sin embargo, el verdadero origen del arte abstracto se encuentra mucho tiempo más atrás, pues se fue componiendo de algunos otros movimientos artísticos antiguos.

El expresionismo, naturalismo e impresionismo son algunas de las corrientes de arte que impulsaron el despegue del arte abstracto, e inspiraron la idea de captar emociones desde el principio de la subjetividad. Visto de esta manera, el arte abstracto tiene también su origen desde la época de la prehistoria, pues la manera más común para representar las relaciones sociales y con su entorno, era a base de símbolos y figuras geométricas que se pensaban como representaciones de seres humanos, naturaleza y animales.

Sin embargo, la evolución de la humanidad sin duda daría un nuevo aspecto y concepto a todo lo subjetivo que pudiese encontrarse dentro del entorno social del ser humano, y no fue sino hasta mediados del siglo XIX que se infundió un interés por lograr hacer representaciones que evolucionaron del arte naturalista a un concepto más abstracto, llegando a consolidarse por fin en el siglo XX como un movimiento de arte reconocido e importante en donde prestigiosos artistas como Picasso o Paul Cézanne dejaron una huella importante que perdurará para la historia del arte en general.

El arte abstracto que conocemos en la actualidad, se ha consolidado como un movimiento de arte que involucra una amplia gama de colores, estilos y que se abraza de diversos movimientos artísticos para existir(Dibujo y pintura.net, Los orígenes del arte abstracto, 2020). 

Hoy en día el arte abstracto no sólo requiere de figuras geométricas para ser considerado como tal, sino que toma también como referencia los sonidos, la espiritualidad, emociones y algunas otras percepciones idealistas de la realidad.

En conclusión, podemos decir que el arte abstracto aplica correcta y absolutamente la creencia de que el arte no debe ser bello para ser arte, sino transmitir un sentimiento o una emoción hacia los demás. Por suerte, hay arte en todo lo que vemos, todo lo que hacemos y todo lo que tocamos día a día, y son esos pequeños detalles llenos de subjetividad los que nos recuerdan que estamos vivos.

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